Las charlas de café a menudo conducen a situaciones inesperadas, como esas sesiones de lluvia de ideas donde se comparten las propuestas más descabelladas con el fin de encontrar soluciones. En estos días, las conversaciones giraban en torno a la Fórmula 1 y al Rally de Suecia.
Sin embargo, no era exactamente una lluvia de ideas, sino más bien una charla entre amigos, donde cada uno intentaba exagerar un poco más que el anterior, todo bajo la pasión que despierta la F1. Se mencionó el próximo regreso de la Fórmula 1 a África, concretamente a Sudáfrica.
“Y tendremos F1 en todos los continentes”, comentó uno de ellos. Otro, entusiasta de la geografía, le corrigió: “En todos no, queda la Antártida”. Fue entonces cuando un tercero añadió: “Bueno, con el cambio climático…”
A partir de ahí, comenzó una conversación nostálgica sobre aquella icónica foto de John Surtees en Nürburgring durante una nevada, o de aquellos ensayos en Silverstone con la nieve alrededor de la pista. Finalmente, recordamos las exhibiciones que algunos monoplazas de F1, como los de Red Bull o BMW, realizaron sobre nieve o hielo.
Quedan diez días para el inicio de los tests, y hoy se cierra el Rally de Suecia. ¿Qué relación tiene esto? Bueno, todo esto conecta con la idea del Gran Premio de la Antártida, por supuesto. Una locura, sin duda, pero si hablamos de carreras sobre hielo, hay que recordar que sí han ocurrido en el pasado.